Cataramax (Generó Literario Cuento)

Presentación

La obra “Cataramax” es así titulada por el nombre de mi pueblo natal “Catarama” en homenaje a esta tierra bella, que brilla como una estrella, mi pueblo amado, aquí es donde yo nací, aquí es donde yo crecí, aquí es donde yo aprendí a vivir en este mundo, Catarama hoy te escribo con orgullo a la vez en nombre tuyo, para que sepas que te adoro. Pabellón radiante y grandioso de la patria tierra valerosa porque eres cuna de hombres y mujeres gloriosos, que día a día luchan por salir adelante. El cuento relata que en el universo existen infinidades de dimensiones, algunas están siendo invadidas; la gente mágica, luchan unos con otros por poder, o simplemente por existir, en muchas de ellas existen personas con poderes sobrenaturales, inclusive pueden transformarse en seres místicos.

Como lo es en la dimensión Cataramax, llamada así por Fernanthix Cataramax, quien luego de que su dimensión fue invadida por Ricardexs, (monstruos atroces que se alimentan del poder central de todas las dimensiones), Fernanthix guerrero príncipe, de la dimensión antes llamada Lantex experto en viajar y tele-transportarse a muchas dimensiones, en una de esas expediciones se encontró con una dimensión vacía, sin imaginarse que luego le serviría para proteger a los muchos aldeanos, guerreros y doncellas de Lantex; cuando Fernanthix salvo a los sobrevivientes de los Ricardexs ellos ofrecieron siempre ser leales a él y así fue que Fernanthix decidió llamar aquella dimensión “Cataramax” para que así todos recuerden el juramento de ser leales a todos los Cataramax…

Por millones e inimaginables años se rumoraba sobre un poder, el cual haría ganar todas las batallas a la dimensión que lo poseyera, ya había pasado mucho tiempo, lo cual hizo que se convirtiese en una leyenda para los habitantes, sin pensar en quien renacería aquel poder.

Fernanthix desapareció de su propia dimensión y el mando del reino Cataramax recayó en el Rey Ribix, todo seguía igual, leales, fuertes y felices; hasta que una fuerza oscura decidió no seguir bajo las órdenes del Rey, Conbe Urdex fue el primer ser que traiciono al Rey, proclamándose así mismo un Rey más lo cual tuvo la atención de algunos guerreros, pero el Rey levanto su brazo y desterró a Urdex y a todos sus seguidores; las consecuencias llegarían tras los años, ya que Conbe reunió a muchos guerreros y así empezaron las fuertes batallas entre los Cataramax y los Urdex. Mientras la guerra daba su curso, el Rey Ribix formo su familia junto a una princesa sobreviviente de la dimensión Triten. En una definitiva lucha, los Reyes de ambos bandos cayeron muertos. Todo parecía perdido; pero tras la muerte del Rey Ribix, el príncipe Félix Cataramax, guerrero leal y fuerte de su padre, fue quien asume la responsabilidad del reino, estuvo siempre listo y aunque la muerte de su padre fue dolorosa él debía cuidar de los suyos y así lo hizo, pronto coronaron al primogénito como el Rey Félix Cataramax. Pero con lo que ellos no contaban, era que desde la oscuridad un nuevo ejército resurgía, no todos habían muerto y bajo el nuevo mando de uno de los hijos de Conbe Urdex, Barraganon Urdex llenó de odio por los Cataramax planeaba una lucha la cual el Rey Félix ni si quiera imaginaba. Pronto empezaría una búsqueda implacable entre ambos bandos para obtener el gran poder que renació en la misteriosa princesa de la dimensión Cataramax.

Castillo Urdex[1] hace ya muchos años atrás… Urdex.- Es el Reino opositor dirigido por el Combe Urdex.

La esposa del Rey exclama la siguiente pregunta:

-¿Cómo puedes tan solo pensar en traer esas viles criaturas aquí?

El Rey Urdex Recluto guerreros y criminales de diferentes dimensiones para poder tener un batallón más poderoso.

El Rey Urdex contesta.

- Si hago un trato con ellos, estaremos a salvo.

- Es todo por tu ambición de gobernar la dimensión Cataramax, ¡Porque no piensas en el futuro de tus hijos!

(Se acerca veloz a ella con los ojos desorbitados)

- ¡ES POR ELLOS QUE HAGO TODO ESTO! por ustedes

- No los podrás controlar. Amor vuelve en sí, te lo suplico.

(Él le da la espalda y mira el anochecer desde el balcón de su habitación)

- He tomado una decisión Laleila, ya no hay marcha atrás.

(Ella se mira al espejo, camina lentamente hasta al lado de su esposo y dice en casi un susurro)

- Aún recuerdo cuando descubrimos a Barraganon.

(Él la mira casi al instante de haber oído sus palabras)

- Prometimos no hablar nunca sobre eso, Laleila has roto tu promesa.

(Ella sonríe levemente sin mirarlo, solo observaba más allá, como queriendo descubrir algo que por el crepúsculo del inicio de la noche no podía ver)

- Aún, lo quiero. Es mi hijo y eso no cambiara jamás. Pero lamento tanto ver como los has criado, como pueden tener en sus corazones tanto odio por los Cataramax[2].

- No repitas ese nombre Laleila.

“Al fin Laleila decide mirarlo a los ojos, en ellos había lágrimas de dolor, ella tenía los parpados llenos de líquido de dolor. Entonces le dijo”

- ¡Ya no puedo soportarlo más Conbe ya no!

Entonces la bella mujer corre hacia el balcón de su alcoba y salta sin pensarlo…

Sin mirar por última vez a su esposo; sin esperar que los brazos rudos de su esposo eviten su caída. Laleila Urdex prefirió marcharse de ese mundo, para no ser testigo de la maldad sembrada en sus hijos.

Castillo Cataramax…

Un guerrero interrumpe algo preocupado en la sala, donde el Rey Ribix se encuentra con su esposa e hijos.

- Mi Rey (Se arrodilla)

- Puedes levantarte Jaimane

- Mi Rey, se solicita su presencia en la estancia Real.

- ¿Qué ocurre?

- El Danna[3] mi señor, tuvo una nueva visión. Danna.- Es el amo de la sabiduria, erudito capaz de predecir el futuro.

Ambos se dirigen hacia el sitio, al llegar, allí se encontraba el Danna, el Rey Ribix toma asiento junto a este hombre, ya estando frente a frente, éste pregunta.

- Dime, Danna, ¿Qué es lo que has visto?

Aquel ser tan inspirado como nunca, levanto su mirada hacia el Rey y dijo:

- Mi Rey lo que he visto tiene un significado de poder, puede ser eso para el que lo posea, pero así mismo puede ser la destrucción si cae en manos equivocadas.

El Rey temió a las palabras del Danna, ya que acertaba en sus premoniciones.

- Dime Danna, ¿A qué te refieres? puedo combatir con aquel poder que mencionas.

- Me temo que no puede hacer eso mi señor, puesto que el poder renacerá en uno de sus primogénitos.

El Rey miro horrorizado al Danna y por mucha impotencia cerro a puño su mano y dijo

- ¿Qué debo hacer?

- Pronto nacerá una niña de su Reina, ella traerá el renacimiento del poder que tanto se anhela. Nadie debe saber de su existencia, la princesa nunca debe salir del castillo, no hasta descubrir su verdadero destino.

- ¿Y qué destino es ese?

- Lamento no poder contestar eso mi Alteza, tan solo puedo ver lo que el destino me quiere mostrar.

El Rey se levanta, de pronto su guerrero más fiel entra y le dice:

- Los Urdex se acercan por el lado sur mi señor, ¿Preparo las tropas mi Rey?

El Rey mira hacia el cuarto en donde deben estar esperándolo su esposa aún embarazada y sus hijos El príncipe Félix y la princesa Hellen; de pronto escucha la voz de Jaimane, quien lo despierta de su pesar.

- ¡Mi Señor!

- Si Jaimane, da orden de defensa.

Jaimane se dirige a dar la orden un poco preocupado por su Rey.

Una batalla en la cual es encabezada por el Rey Ribix siguiéndolo el capitán de sus guerreros Jaimane Cacuanco. Esta vez su enemigo Conbe Urdex no se encontraba en la lucha por lo que la batalla no duro y las tropas de Urdex se esparcieron huyendo de aquel lugar.

Los guerreros dan marcha atrás regresando al castillo dando gritos de emoción por otra batalla ganada, pero la preocupación del Rey no dejaba que disfrutase esta vez por lo que Jaimane se acercó a él montando su Ciril[4]. Ciril.- Animal similar a un corcel (Caballo).

- Mi Alteza, puedo sentir su desesperación. ¿Qué es lo que no deja a sus pensamientos en paz?

El Rey lo mira y dice:

- Mi fiel guerrero Jaimane, he descubierto que mi esposa dará a luz una niña.

- Pues aquella noticia es motivo de celebración su majestad, no veo el problema en ello.

- Eso no es todo Jaimane, lo que trae mi hija es aún más peligroso, no sé si podre con esto.

- Mi señor (Él detiene su Ciril, mira fijamente a su Rey y dice) comprendo la pesadumbre de sus palabras, le prometo mi señor ayudarle hasta el día de mi muerte y aún más allá, mi descendencia seguirá con esa promesa.

El Rey le sonríe, coloca su mano en el hombro de él y dice:

- Sé que lo harás amigo mío, sé que lo harás.

Cuando su Ciril empezó a galopar uno de sus guerreros se acercaba a ellos.

- Mi Rey, tengo información acerca de Conbe Urdex.

- Dímela, deja la cortesía a un lado por un instante.

- La Doncella Laleila se ha suicidado.

-¡No lo creo! horrible destino para Laleila, ahora entiendo la ausencia de Conbe, tal vez esto le haga recapacitar y desista de sus ataques al reino.

Entonces reiniciaron galope a Ciril en dirección al reino.

En el Castillo Urdex la tropa regresaba, el capitán de la misma va hacia Conbe.

- Mi señor el Rey Ribix nos esperaba.

Conbe miraba por la ventana la cual daba una vista larga hacia el reino de Cataramax, este dio vuelta hacia el capitán y lo miro fríamente.

- Tal vez es porque mi tropa no tiene el mando lo suficientemente fuerte.

- Pe-pe…pero mi Señor (Titubeó)

Entonces Conbe se acerca a él y saca la espada del capitán.

- ¿Cuándo fue la última vez que afilaste tu espada Heitubex?

-¡Hoy mi Señor!

- Entonces debe de tener muy buen filo, ¿No es cierto Heitubex?

El hombre miraba nervioso a su Rey, mientras los demás esperaban el desenlace de aquel momento, entonces algo inesperado ocurrió, los hijos de Conbe aparecieron.

El Rey no se inmuto ni dejo del lado la espada, al contrario miro fijamente a sus hijos y dijo:

- Observen niños, esta es una lección más que les daré, “Nunca permitan a gente débil en su batallón”

Entonces empuño la espada del capitán Heitubex en sus manos y la enterró en el corazón de este guerrero, cayendo muerto frente a los ojos de los niños y de algunos guerreros. Luego lanzo la espada lejos y se acercó a sus hijos.

- No permitiré debilidad en este reino, ni si quiera en ustedes.

Luego se marchó de allí, Barraganon y Betavel, los hijos de Conbe Urdex, observaron el cuerpo inerte del antes capitán de la tropa Urdex.

Meses más tarde, en el reino del Rey Ribix, nacía su hija, el parto era muy difícil el Rey estaba preocupado, por lo que decidió acompañar a su amada en aquel momento. Luego de varias horas, al fin la princesa nació y sus padres escucharon su llanto por primera vez. Estaban tan felices, colocaron a la bebe en los brazos de su madre y esta la beso diciendo.

- ¡Te llamaras Magda!

- Así será mi amor (Dijo el Rey con lágrimas en los ojos)

La Reina sintió un fuerte dolor lo cual preocupo al Rey.

- ¿Qué le ocurre partera?

- Ah perdido mucha sangre mi señor, ¡Tal vez no resista!

- ¡Haga lo imposible!

La Reina era una mujer muy gentil, un ser humano maravilloso, tomo tiernamente la mano de su Rey, y le dijo casi a susurros.

- Mi vida, tengo un pie en el más allá ahora mismo, siento que debo decirte esto.

- Tú vivirás amor, ya lo veras, ¡Eres fuerte!

- Cuida a nuestros hijos Ribix, cuida el futuro de Magda.

- ¡No te despidas por favor! (El Rey lloraba desconsolado, todos empezaron a salir para darles privacidad)

- Te amo mi Rey…

- Te amo mi Reina…

Entonces se besaron y así fue que llegando una vida se va otra. Una vida por una vida. El Rey tomo la bebe de los brazos inertes de su esposa fallecida y la levanto aún con lágrimas en los ojos.

- Hija de mi propia sangre, princesa Magda tu llegada me ha quitado a mi amor, ya no podre amar más a una mujer, pero podre amar a una nueva hija. Mi promesa es cuidar de tu futuro hija mía. Tú, tus hermanos y mi Reino serán mi vivir de ahora en adelante. Desde hoy serás la princesa misteriosa.

Muchos años pasaron, el Rey Ribix cumplió su promesa; las Batallas iban y venían dando siempre el mismo resultado, Cataramax ganaba cada enfrentamiento enfureciendo aún más a Conbe Urdex.

Mucho tiempo pasó el príncipe Félix ahora era un joven alto, astuto y corpulento entrenado por los mejores guerreros. La princesa Hellen era la más bella del reino, todos admiraban su hermosura. Sin embaro, la princesa Magda, jamás salía fuera del castillo, el Rey Ribix jamás le contó lo que el Danna dijo, pero siempre cuidaba de ella, aunque le era cada vez imposible.

Las princesas Hellen y Magda estaban leyendo en uno de las amplias bibliotecas del castillo, entonces Magda se levanta y mira tristemente desde la ventana con rejas de color gris, algunos guerreros estaban practicando rigurosamente, como todos los días. Entonces su hermana Hellen entrecierra sus ojos observándola.

- ¿Son muy fornidos verdad, querida hermana?

La Princesa Magda responde ante una de las muchas provocaciones de su hermana.

- ¿Has hablado con uno de ellos alguna vez Hellen?

- Claro que sí, es más, uno de ellos es amigo mío.

- ¿Ah si? y nuestro Padre sabe eso.

- (Hellen pone mala cara) claro que no, sabes perfectamente lo celoso que es el Rey Ribix. Me desterraría del reino.

- Lo sabía. ¡Es todo una farsa!

Hellen mira fijamente a su hermana.

- ¿Es un reto?

Ambas sonríen y corren hacia la puerta, se esconden y caminan al ver a una Doncella por los pasillos. Cuando está despejado, se dirigen hacia el salón de prácticas y se esconden en una de las cámaras de los guerreros, observándolos desde ahí en silencio.

Entonces murmura Magda.

- Vamos, dime cuál de ellos es tu amigo.

Hellen observa como buscando a alguien, al encontrarlo dice:

- Es aquel.

Ambas miran hacia un alto y corpulento guerrero quien luchaba con otro guerrero casi igual que él.

- Se ve algo rudo.

- Lo es, y también puede convertirse en un fuerte y peligroso tigre blanco.

Magda mira asombrada hacia el guerrero.

- ¿Y cómo se llama?

Una voz las interrumpe y asusta al mismo tiempo.

- ¡Se llama Aragón!

Ambas dan media vuelta encontrándose con la cara enojada de su hermano el príncipe Félix. Aquel alboroto llamó la atención de algunos guerreros.

- Félix, nosotras simplemente, (Intento decir Hellen)

- ¿Ustedes que hermanas? sabes perfectamente que Magda tiene prohibido bajar de los cuartos reales. Si nuestro Padre se entera.

- Pero no lo hará, ¿Verdad hermanito?

Ambas lo miran con ojos tristes, por lo cual Félix desiste de acusarlas.

- ¡Solo por esta vez!

Ellas sonríen y empiezas a caminar hacia dentro el castillo, pero Félix detiene a Magda para decirle.

- No lo vuelvas hacer por favor.

- De acuerdo.

Las princesas se van de allí, entonces el príncipe Félix camina hacia los guerreros quienes lo esperaban, pero ellos no le hacían reverencia alguna, ya que Félix les pidió que no lo hiciesen; que lo trataran como uno más de ellos y así crecieron, siendo amigos de unos más que otros. Félix se dirige hacia uno de ellos, el guerrero llamado Aragón.

- ¿Cómo van con la práctica?

- Estamos calentando. ¿Te unes, príncipe Félix?

- (Éste sonríe) Por supuesto guerrero Aragón.

Empieza la práctica y todos los guerreros forman un círculo alrededor de ellos, alentando a ambos. Golpes por parte de Aragón son esquivados por el príncipe y este le sonríe diciendo.

- Debes hacer más que eso si quieres ser el protector de mi hermana Hellen.

- ¿Quieres más que esto? (Ambos sonríen)

Entonces Aragón empieza a dar un sin números de trampolines y con ellos patadas voladoras lo cual una de ellas impacta con el cuerpo de Félix, éste cae al suelo y por ser la primera vez que alguien lo golpea, un profundo silencio embarga la sala de entrenamiento. El príncipe Félix se levanta muy serio, luego sonríe a Aragón y le dice.

- No está nada mal, eres un gran guerrero Aragón.

Los ruidos vuelven a la sala, Félix y Aragón se dan las manos.

- ¿Seguimos entrenando?- Le dice Félix a Aragón

- Por supuesto, quiero seguir derrotándote – Sonríen y de pronto una voz emana del grupo de guerreros.

- Es mi turno ahora.

Todos fijan su mirada hacia la voz fuerte algunos se apartan y Félix puede ver al guerrero Cremun Cacuanco hijo del fiel guerrero Jaimane Cacuanco, hermano de Aragón y Siul. Desde la infancia el príncipe Félix ha tenido deslices con Cremun por lo que decidió no hacer caso a las muchas insinuaciones de pelea con él, pues si quieres ser un buen líder debes unir a tus guerreros y no lo contrario.

El príncipe da media vuelta hacia la puerta pero Cremun le dice en voz alta pero con fingido respeto.

- ¿Acaso tiene miedo mi señor?

El silencio reapareció, Aragón se acerca a su hermano.

- ¡Ya basta Cremun!

- ¡No es contigo, hermanito!

El príncipe da vuelta para encontrarse con la mirada de Cremun y responder.

- ¿Miedo yo? Félix Maximiliano Cataramax… ¿Por qué debería de temer?

Félix sabía que podía ignorar a Cremun como ya lo había hecho antes, en frente a su futura tropa, él no permitiría ser humillado así delante de ellos.

Félix regresa al salón y le sonríe a Cremun aunque con mutua fingides.

- ¿Es solo práctica, verdad Guerrero Cremun?

- Si no es eso ¿Qué más podría ser Príncipe Félix?

Los ojos azules de Cremun tenían un brillo singular, su mirada reflejaba odio y desesperación por ganarle a su competidor. Y aún delante de todos.

El lugar estaba invadido por una adrenalina feroz, todos esperaban que el príncipe Félix le diera su merecido ya que Cremun siempre ha sido un presumido y arrogante guerrero.

Cremun empieza a dar golpes sorpresivos a Félix, mientras él solo los esquiva. Félix sabe perfectamente que luchar con enojo no hace bien, el malestar mental achica la mente y es mejor esquivar a golpear por el momento aunque eso alimente el enojo en Cremun.

- ¡Pelea Félix!

Le dice Cremun algo eufórico, el príncipe mira a su alrededor y se detiene de su posición de pelea para decir.

- No quiero luchar contigo Cremun, no con tus oscuras intenciones.

- ¿De qué hablas?

- Sé que nunca te he caído bien Cremun, pero eso debe terminar ahora, somos del mismo equipo amigo y cuando sea Rey quiero que luches a mi lado en contra de vuestros enemigos.

Todos miraban con admiración al príncipe Félix, luego de decir aquellas palabras le brinda su mano a Cremun mientras que él atónito mira a su alrededor con desprecio y sintiéndose algo humillado le responde.

- Luchare siempre en toda Batalla príncipe Félix pero no le prometo fidelidad a usted.

Luego Cremun da media vuelta y se marcha de allí, la preocupación se nota en el rostro del príncipe, pero eso es algo que se arreglara con el tiempo pensó él en su mente.

Mientras que, en el castillo de los Urdex, el príncipe Betavel luchaba con un guerrero, golpes iban y venían sin descanso, aunque el guerrero era fuerte, Betavel se valía de trampas y artimañas, de pronto se convierte en tigre sorprendiendo al guerrero y dejándolo mal herido. Cuando vuelve a su forma humana sonríe y toma una capa para tapar su desnudes. Aplausos se escuchan detrás de él, era la princesa Laleila hija del Rey Conbe Urdex y Laleila Urdex, quien había estado observándolo.

- Admiro tu valentía querido hermano.

- Gracias querida hermana.

- Aunque nunca juegues limpio ni con tus propios guerreros.

- ¿De qué hablas? Lo derrote limpiamente.

- ¡Pues yo lo veo muy sucio!

- Solo es un poco de sangre Laleila, ve a molestar a Barraganon o a que papá te siga mimando.

- ¿Qué es lo que has dicho Betavel? – La voz de su padre retumbo en el salón, Betavel lo miro un poco temeroso, Conbe mira seriamente a su hijo luego el cuerpo herido del guerrero; se acerca a Laleila y le da un beso en la frente.

- No me importa tus modos de entrenamiento hijo mío, pero ¡Lo que jamás soportare de ti es que si quiera des una mala mirada a tu hermana! Estas en este mundo para cuidar de ella.

Betavel baja la mirada y asiente a su padre quien luego de eso se retira, Laleila se agacha para ver más de cerca al guerrero herido.

- ¿Qué haces? – Le dice su hermano

(Ella levanta su mano e intenta acercarla hacia el Guerrero, pero su hermano la detiene)

- ¡Ni si quiera lo pienses Laleila!

- ¿No deberías llamar a alguien? – Ella se levanta

- ¡Es solo un estorbo débil!

- No se ganan guerras con un soplo hermano, sino con estorbos débiles, como tú los llamas.

Laleila camina lejos de él.

- Ahora sé porque mi padre te ama tanto.

Ella da vuelta para mirarlo y Betavel termina diciendo.

- ¡Porque eres como ella! – Laleila se va sabiendo que a lo que su hermano se refería era a su Madre.

Ya al anochecer en el castillo Cataramax la princesa Magda estaba asomada en su ventana enrejada imaginando que había lejos de allí, fuera de las murallas del castillo. De pronto la puerta se abre y ve que su hermana Hellen se acerca a ella.

- ¿Aún despierta Magda?

- No puedo dormir.

- ¡Mañana designaran a nuestros protectores para toda la vida!

- Lo se Hellen.

- ¡Odio eso! nuestro padre cree que no podemos protegernos nosotras solas.

- ¿Y podemos hacerlo?

- Claro que si Mag… Escucha te diré un secreto.

- Adoro los secretos.

- He estado entrenando a escondidas de todos.

- Pero nuestro Padre dijo que…

- Sé lo que dijo, pero he pensado que, si le muestro que puedo defenderme sola, si tan solo él confiara en mí, podría ser libre.

- Creo que tengamos protectores no significa que nuestro padre no confié en nosotros, yo creo que él nos ama mucho. Si hermana, ¿Qué más libertad quieres? tú puedes salir a los jardines del castillo, puedes desfilar con nuestro padre y hermano rumbo a otros reinos de la dimensión Cataramax, puedes…

- Ya basta Magda, ¡Entendido tu punto!

Los ojos de la princesa Magda se entristecieron al describir lo que ella tanto anhelaba, lo cual era ser libre, pues, aunque amara a su padre siempre deseo ver más allá de su cuarto.

- No estés triste hermana, sé que muy pronto podrás acompañarme a ver las luchas de los guerreros.

Ambas sonríen tontamente.

- ¿Y si no? ¡Deberías fugarte!

Hellen se despide de su hermana con un beso y sale de los aposentos de Magda, dejando sembrado en la mente de ella una de sus travesuras.

- ¿Porque no? Solo daré un pequeño vistazo alrededor del castillo.

La Princesa se colocó su capa gris luminosa y se escabulle sin ser notada por alguna doncella. Cuando llega a la puerta grande se da cuenta que unos guerreros la resguardaban entonces se dio por vencida y murmuro.

- ¡Hasta aquí llego mi Aventura!

Dio media vuelta, pero a lo que toca una roca de la pared esta se mueve abriendo un pasadizo secreto, Magda sonríe y dice:

- ¿Qué destino tan misterioso me aguardara allí?

Entonces la princesa mira detrás de ella e ingresa cerrándose tras ella, se coloca la capucha de la capa al llegar al otro lado del pasadizo, pues se da cuenta que llega a los grandes jardines del castillo.

- Aún estoy dentro las murallas, ¡Pero me conformo!

La princesa camina disfrutando de cada una de las rosas, sonriendo dulcemente y respirando aquel limpio aire que la rodeaba, cuando de repente sintió que alguien se acercaba, se escondió y espero.

Intento ver de quien se trataba, pero la oscuridad de la noche no ayudaba mucho, a lo que escucho un rugido sintió mucho miedo y empezó a correr sin parar y sin saber dónde se dirigía. A lo que tropieza y aquel animal se acerca, la princesa se aterroriza aún más pues jamás había visto un lobo, sus ojos eran plateados y su pelaje blanco y negruzco. Entonces ella empieza a suplicar.

- ¡Por favor, no me lastimes! Te lo ruego…

Ser místico da un paso atrás notando el terror en la voz de ella. Luego se introduce en los arbustos y flores del jardín, la princesa se levanta y observa nerviosa hacia donde el lobo ingreso. Entonces una voz se escucha desde ahí.

- No tema su majestad. Soy tan solo uno de sus guerreros.

Magda intenta ver hacia la voz.

- ¡Exijo tu presencia!

- ¡Eh! lamento no poder obedecer esa orden mi princesa.

- ¿Porque no? que te lo impide.

- Estaba en una de mis guardias y pensé que usted era un espía, le ruego me disculpe.

- ¡Aún no has explicado por qué me impides verte!

- Es algo embarazoso mi princesa, lo que ocurre es que nosotros los guerreros al convertirnos en lobos, tigres u algún otro animal al cambiar a nuestra forma habitual, bueno quedamos sin vestimenta.

La princesa se sonroja y dice nerviosamente al guerrero.

- Esta explicada su falta de obediencia guerrero, pero ¿Cómo es que sabes quién soy?

- Soy uno de los hijos del capitán Jaimane Cacuanco mi Lady, y la he visto algunas veces.

- ¿En serio? creí que había sido prudente pero ahora me doy cuenta que no. Si tú me has visto, no puedo ni imaginar, Cuantos más.

- Es muy peligroso para usted estar aquí afuera y no solo porque podrían hacerle daño sino porque podría contraer alguna enfermedad.

- No soy tan débil como mi padre ha dicho.

- Lo siento, no quise decir eso.

- Lo sé guerrero.

- Siul, mi nombre es Siul Cacuanco.

- Mucho gusto, soy la princesa Magda Cataramax, aunque ya lo sabes.

Ambos sonríen, entonces Siul se da cuenta de su imprudencia y aclara su garganta para decir.

- Princesa, ya debería de volver a sus aposentos.

- ¡Es verdad! pero ¿Cómo saldrás de este embrollo?

- aam, yoo… Pues, ya veré qué haré, princesa, no se preocupe por mí.

- ¡Te ayudaré! volveré en un instante Siul.

Pasaron unos cuantos minutos. Siul ahí en los arbustos murmuraba.

- ¡Cuando mi padre se entere de esto me matará!

- ¿Siul, aún sigues ahí?

- Aquí mismo princesa Magda.

- Te he traído esto, (una capucha de Ciril roja) lamento no haber podido conseguir más, pero era lo único que estaba a mi alcance sin que me descubriesen.

- Descuide princesa, no debió haberse molestado.

La princesa extendió la capucha de Ciril y un brazo salió desde la oscuridad lejos de la claridad de la luna, Magda quedó algo abobada, entonces dio un paso atrás, lejos de ahí y esperó.

- Le pido mis sinceras disculpas mi Lady, no soy digno de que sus ojos sean testigos de tan ofensa.

- Descuida será un secreto de los dos.

Siul al fin muestra su espléndida figura a la princesa, quien queda asombrada por tal radiante hermosura masculina, él cubría su pecho con una de sus manos mientras que con la otra sostenía la capucha.

- Creo haber visto antes, guerrero Siul. ¿Eras quien luchabas junto con Aragón esta tarde?

- ¿Conoce a mi hermano?

- No, ¡Pero mi hermana sí!

Ambos sonríen, de repente se escuchan trompetas que marcan la media noche para todo el reino.

- Creo que ya deberíamos volver princesa.

Juntos vuelven a sus respectivas habitaciones y jamás olvidan ese momento.

Al siguiente día, el acto de elegir a los protectores de las princesas se llevaba a cabo, ellas esperaban en la habitación en donde siempre charlaban con su padre.

- ¿Quién crees que será tu protector Hellen?

- Nadie será mi protector ¡No, cuando papá note mi fuerza!

- No disgustes a papá por favor.

- Al contrario, se sentirá orgulloso y esperará lo mismo de ti, Magda, no solo la hermosura nos ayudará a sobrevivir en este mundo. Recuerda eso hermana, hay gente mala fuera de las murallas.

- Lo sé, nuestro padre siempre me lo dice.

Un guerrero les dice que pueden salir y al hacerlo ven a muchos guerreros allí, Hellen sonríe al ver a Aragón su amigo de la infancia. Magda nota algunas miradas curiosas de los guerreros ya que ella no es tan popular y solo algunos la han visto, como el guerrero Siul, quien estaba en segunda fila viéndola fijamente y ahora si vestido adecuadamente; la princesa al verlo se sonroja.

- ¿Estás colorada por uno de ellos? - Le dice su hermana Hellen

- ¿De qué hablas?

Entonces el Rey empieza a decir:

- Hoy mis fieles guerreros, tenemos el acto más sagrado para mí; y aunque las puertas del castillo no están abiertas para el pueblo por motivos de seguridad. Estoy honrado por todos los valientes guerreros que se han inscrito para participar en el torneo de elección de protectores de mis más preciados tesoros; mis hijas, desde que asumí el reino decidí aprobar una ley en la cual sean siempre las princesas del reino protegidas por guerreros, nobles y fuertes. Y cuando mi mando acabe estoy seguro que esta ley seguirá bajo el Reinado de mi hijo, el príncipe Félix.

Las ovaciones no se hicieron esperar. Entonces el Rey prosiguió.

- ¿Quiénes son los guerreros que creen ser dignos de proteger a mis hijas?

Algunos fuertes hombres dan un paso adelante, entre ellos se encuentra Aragón, el Rey se levanta de su silla y observa con detenimiento a cada uno de ellos. Luego sonríe y regresa a su lujosa silla real, para decir:

- Se quiénes serán los guardianes de mis hijas.

Todos se miran algo indecisos ya que se suponía que los guerreros debían de ganarse ese honor, luchando entre ellos. A lo que él Rey dijo a todos:

- He observado desde antes y no necesito a los guerreros más fuertes, sino a los que entreguen el corazón en su trabajo, guerreros que sean fieles y sabios a los que le entregaré mi entera confianza. Es por ello que Aragón Cacuanco eres el elegido de cuidar a la Princesa Hellen.

(Aplausos)

- Y para mi hija la Princesa Magda elegí a Mateo André; guerreros sabios, fuertes y fieles. Desde hoy hasta el día de sus muertes ustedes son los encargados de la protección de las princesas del reino Cataramax.

De pronto las puertas del castillo se abren y ahí ven caer a un guerrero muy mal herido, Jaimane va hacia aquel hombre.

- ¿Qué ocurrió Kalet?

El hombre casi con su último aliento responde a su capitán:

- Sseño...or Los, Urdex atacan el castillo! Se acercan por el sur a fuerte Galope a cuarenta metros

- ¡Lleven a este hombre a que curen sus heridas!

Jaimane se levanta con la mirada valerosa hacia su Rey diciendo ¡Es un honor nuevamente pelear a su lado mi Rey!

El Rey Conbe Urdex dirigiendo sus tropas para dar inicio a la guerra que desde hace años intenta adueñarse de la dimensión Cataramax, por alguna extraña razón ninguno de los hijos del Rey Urbex había asistido a la batalla. Una gran batalla se formó luego de ambas perdidas en los dos reinos, Los Reyes Ribix y Conbe se enfrentaron a muerte, fue una lucha muy larga en la cual el reino de Cataramax, se encontraba perdiendo la batalla el Rey de Cataramax enfrentándose a Conbe y tres guerreros en su contra pierde su vida durante el tenaz encuentro, y la princesa Magda observa como matan a su padre, ella entro en un estado inexplicable, sentía que moría a la vez sentía que nacía, un poder misterioso la embargaba y empieza a surgir algo extraño, su cuerpo comienza a transformarse en una especie de zarza ardiente de fuego blanco y azul, de sus espalda salen alas de llamas blancas, sus ojos color café canela, cambian de color lila e iris forma de triángulo color rojo, su cabello se vuelve transparente sus manos convertidas en garras, su hermano Félix la miró y exclamó. ¡Magda ayúdanos!

La princesa en sus ojos demostraba ansiedad de venganza, sedienta de sangre por vengar la muerte de su padre, da muerte al Rey Conbe y los tres guerreros que mataron a su padre en un abrir y cerrar de ojos, sus adversarios intentan capturarla pero era muy poderosa, no podían controlar una guerrera de tal magnitud que nunca en la vida habían enfrentado, luego intentan debilitarla con un cañón de poder energético de materia, disparan tres veces seguidas impactando dos veces en su cuerpo y matando a decenas de guerreros de Cataramax pero eso hace que se enfurezca más convirtiéndose en un ave enorme he iluminante su poder era tan feroz que era visible, su cuerpo era una zarza ardiente que tenía la forma de un ave, en el cual podía producir llamas quemando y matando a los gurreros adversos, Conbe ha muerto los guerreros al ver el abominable poder que posee la princesa Magda deciden retirarse, al darse cuenta la princesa dice ¡No escaparan¡ da un gran salto de treinta metros pasando por encima de sus enemigos, frente a ellos diciendo ¿Por qué huyen de lo que comenzaron contéstenme?, muy molesta y con una conducta maléfica que nunca en su vida había mostrado, los guerreros contestaron, ¡Nosotros solo seguíamos las órdenes del Rey Conbe!

- ¡Quería ver muerto a su padre!

Enfurecida aún más el odio la embargaba no era una mujer que pensaba solo deseaba exterminar a sus adversarios, sus ojos se tornaron a color rojo por completo, ella floto sobre el aire su aura de zarza de llamas blancas comenzó a brotar energía en forma de relámpagos, este poder se produjo como un tipo de explosión la magnitud de la explosión alcanzo un perímetro de Treinta y dos metros de largo y veinte metros de ancho, exterminando a todos los guerreros opositores, la explosión se produjo dos veces más reduciendo a cenizas los cuerpos de los guerreros ya derrotados, la princesa había perdido el control sobre si misma ella no era la que dominaba su cuerpo era su poder, esa energía misteriosa que salía de su interior, al ver esto su hermano Félix y Siul, le dicen que la batalla termino cálmate ya, Siul decide acercarse gritando Magda, por favor escúchame, tienes que calmarte ya todo paso, estamos a salvo gracias a ti, Magda al escuchar las palabras de este guerrero calma su conducta su aura, comienza a desvanecerse, pero aún mantenía su forma de zarza ardiente de llamas blancas y azules, Siul se acerca lentamente Magda soy yo Siul el guerrero que conociste hace poco, aquella noche cuando andabas afueras de tu alcoba.

Magda callada no reaccionaba, unos minutos más tarde el aura de Magda, comienza a crecer y su poder empieza a tomar nuevamente la forma de relámpagos, Siul desesperado abraza a Magda quemando su cuerpo, el poder que la embarga empezaba a desvanecer, Siul soporta las quemaduras, diciendo Magda sé que nos conocemos poco pero desde esa noche, me he sentido extraño, no existe ni un solo segundo que no aparezcas en mi mente, esto me da a entender que lo que siento por ti es amor y es real, no soy tu protector pero en este momento siento que te estoy protegiendo, protegiendo de que no hagas daño a nuestros compañeros por favor reacciona, te lo imploro lucha con esto que te esta dominando, eres fuerte puedes calmarlo, tengo fe que esto pasara, Siul decide besar los labios de Magda, quemando su rostro, en ese momento la zarza ardiente con llamas blancas y azul desaparece, dejando a Magda completamente desnuda ya que las llamas habían hecho cenizas su vestimenta, ambos caen inconscientemente, Siul con graves quemaduras, y Magda debilitada. El príncipe Félix, cubriéndola con un manto a su hermana, la lleva al castillo junto con Siul para que los atienda un curandero, pasan tres días, las afueras del castillo está todo tranquilo, el reino se encuentra en un ambiente de paz, Magda despierta de su estado inconsciente una de las súbditas enfermeras que estaba encargada de su recuperación avisa a su hermano Félix, ¡Magda ya has despertado¡ exclamo el príncipe que bueno que estas bien, me alegro mucho de no perderte, Magda responde y mi padre la batalla, era un sueño acaso…

- ¿Qué paso con mi padre?

Su hermano en silencio

- ¿Qué demonios pasó con mi padre responde?

- ¡No era un sueño! lo que paso es verdad nuestro padre está muerto, y muchos compañeros también, ganamos la batalla gracias a ti, de hecho tú fuiste la que nos salvaste.

Magda llorando muy dolida por una pérdida muy especial.

-Hermano ¿Ahora que nuestro padre se ha marchado tú serás Rey?

- ¡Bueno la política de nuestro reino determina eso, pero aún no lo sé!

-Hermana hay algo que debes saber, Siul arriesgó su vida para traerte de vuelta cuando te transformaste en aquella poderosa ave, ¿De dónde aprendiste eso?, ¿Quién te dio todo ese poder?

-Magda. ¡No lo sé ese poder surgió de la nada!

-Bueno él esta postrado en cama y en coma, revisando su dormitorio encontramos esto es un escrito que debes saber.

Escrito de Siul:

Hoy conocí a una doncella encantadora, es muy linda desearía verla todos los días que me quedan de vida, para así poder estar contento, ya que su imagen me inspira alegría, paz y armonía, es muy difícil ya que ella es la princesa mimada por el Rey, espero algún día este deseo se haga realidad ya que ella me ha despertado un sentimiento especial.

Tú vibras en mi corazón

con una fuerza especial,

que llena toda mi vida

de una emoción esencial.

A tu lado yo percibo

un soplo primaveral,

como si algo me envolviera

de un perfume angelical.

Me gustas y tú lo sabes,

lo sabe también el altar[5],

jamás podré olvidarte

aunque me pierda en un bar.

Llenas tú toda mi vida

y siempre la llenaras,

por eso me siento triste

cuando tú conmigo no estas.

Una mujer como tú

es difícil de encontrar,

en ti he visto la gloria

en tu voz en tu mirar.

Eres para mí criatura,

todo lo que yo soñé:

un pedacito de cielo

que al cielo yo robe.

Por eso te pido, vida,

que tú me llenes de amor.

y algún día doncella querida

amarte hasta tu dolor.

Altar.- Es una especie de mar que yace en la dimensión Cataramax.

Es solo un sueño, una aspiración todo esto es imposible de que se cumpla ya que yo soy un guerrero no tan alagado por el Rey.

Magda sonríe muestra un poco de alegría, su hermano también expresa un poco de respeto por el acto valeroso de su compañero Siul.

-Magda ¿En dónde se encuentra Siul?

- Félix ¡Esta en sala de los curanderos recuperandose!

- ¡Llévame hacia allá!

- Magda debes descansar aún no estás en condiciones por favor espera hasta mañana.

- Está bien contesto Magda.

En ese preciso momento llega Hellen, diciendo hermana querida que bueno que despertaste, gracias a Cataramax que estas bien.

- Si hermana estoy bien, no te preocupes ya ha pasado todo, pero nuestro padre está muerto.

Hellen quedo en silencio entristecida.

Al día siguiente Magda junto con sus hermanos Hellen y Félix van a visitar al guerrero Siul, al llegar ven el cuerpo del mismo postrado en una cama todavía en coma sin reaccionar, Magda contenta, pero a la vez triste diciendo te vas a recuperar, estoy esperando con ansias que tu salud mejore con una sonrisa en el rostro.

Félix va a la cámara del Danna.

-Danna ¿A qué se debe su vista príncipe Félix?

-Félix, ¿Quiero saber qué fue lo que le paso a mi hermana?

-Danna ¡Bueno ¡no me queda más que responder a su interrogante, su hermana posee un poder extraordinario usted fue capaz de presenciarlo, es por eso que su padre no permitía que su hija salga mucho del castillo, ese poder que posee se asemeja mucho al génesis de su universo

-Félix ¿Pero por qué mi padre nunca nos mencionó que esto pasaría?

-Danna ¡Las intenciones de mi Rey ¡eran proteger todo el reino, ya que ese poder se extiende mucho más allá de los confines de su universo, y puede ser percibido por todo ser que tenga la habilidad de predecir, similar a mi poder.

-Félix, no entiendo ¿Por qué mencionas mi universo, pensé que solo existe esta dimensión?

-Danna ¡Pues lamento contradecirlo¡ pero el poder de la materia es desarrollar, reproducirse nosotros somos seres vivos que nos reproducimos y hemos habitado esta dimensión, así como nosotros existen otros seres, tal vez este universo este dentro de otro y así sucesivamente la magnitud del mismo es ambiguo (desconocido), en fin dichos seres ahora que su hermana despertó su poder, pueden venir en busca del poder que posee, es una pena pero el reino en un futuro no muy distante va ser invadido, por seres extraños, intentando colonizarnos, mi príncipe ahora usted posee una gran responsabilidad, debe protegerlos, y ayudar a su hermana a controlar su poder, es muy triste decirle pero tiempos malos acechan su reino que le dejo su padre.

-Félix ¡Que ¡…

Sin embargo los hijos de Conbe Urdex: Laleila, Barraganon y Betavel en el castillo de Urdex se encontraban entristecidos por la muerte de su padre, ¡Mi padre ha caído no puede ser¡ exclama Betavel, Barraganon poseído por el odio decide declarar guerra eterna a Catarmax diciendo; a partir de este día yo como su nuevo Rey de Urdex, no quiero ver a ningún ser del reino Cataramax vivo, en esta dimensión, todos tienen que ser asesinados bajo las garras de un Urdex, cuando ningún “Cataramax” quede vivo esta dimensión se llamara Urdex.

En algún lugar del universo un ser llamado Crixus, denominado el emperador de la dimensión 23.8 Plantox, sintió la vibración del poder de Magda, este poder que sentí es muy aterrador tal vez sea la explosión de un astro, es imposible que sea la explosión de un astro ya que su fulgor era cálido, tendré que dejar la galaxia e ir y averiguar si es el poder que dicen que vaga por el universo y adquirirlo a toda costa.

Esta historia continuara…

[1]Urdex.- Es el reino opositor creado por su Rey Conbe Urdex que desea dominar la dimensión Cataramax .

[2] Cataramax.- Es una dimensión paralela llamada así por su invasor, colonizador Fernanthix Cataramax decidió bautizarla con este nombre debido a que la lealtad, que sus aldeanos prometieron sea transmigrada de gemación en generación, por siempre como ellos mismos los juraron.

[3] Danna.- Significa amo de la sabiduría, brujo capaz de predecir el futuro, compañero y mentor del Rey.

[4] Ciril.- Animal fuerte que puede recorrer muchos kilómetros, su aspecto físico es similar al de un Corcel (Caballo).

[5] Altar. - Es una especie de mar de la dimensión Cataramax.